La capital es ya uno de los destinos preferidos del inversor internacional; sin embargo, los barrios y el tipo de casa que adquieren varían según su procedencia. El mercado inmobiliario español ha experimentado en los últimos años una creciente influencia del capital extranjero. Este fenómeno protagoniza más del 14% de las operaciones que se firman en el país, según los Registradores. En Madrid, el peso del comprador internacional se dispara en el segmento de lujo, representando el 80% de las compraventas, según el último informe de Evernest.
Revitalización de áreas clave en Madrid para inversores internacionales
El incremento en la participación de compradores extranjeros ha sido fundamental para la revitalización de áreas clave y ha contribuido a la modernización de la ciudad. La afluencia de capital internacional ha impulsado la renovación urbana, la apertura de hoteles de cinco estrellas, tiendas de alta gama, restaurantes y otras ofertas de lujo. Estos elementos han elevado los estándares del mercado y han mejorado la calidad de vida en Madrid.
El perfil del comprador extranjero se ha diversificado, reactivando varias zonas de Madrid más allá del tradicional barrio de Salamanca. Áreas como El Viso y La Moraleja también han visto un aumento en la demanda debido a esta diversificación.
Impacto en los precios de las viviendas de lujo
La gran demanda extranjera ha causado que el precio de las viviendas de lujo y gran lujo se dispare en los últimos años, llegando incluso a duplicar su valor. La poca oferta y la alta demanda son los factores más importantes que influyen en el alza de los precios. Actualmente, no hay suficiente suelo disponible ni edificios para rehabilitar. El apetito tanto de pequeños como de grandes inversores, la liquidez presente en el mercado, junto con el crecimiento de las compras destinadas al alquiler turístico y al flipping, han impulsado el aumento del precio.
Factores de atracción para inversores internacionales
La calidad de vida, unos costes más asequibles que otros mercados -a pesar del encarecimiento de los últimos años- y una rentabilidad atractiva son puntos en común que atraen a estos compradores. Sin embargo, los gustos y necesidades a la hora de adquirir una vivienda son diferentes según su país de origen.
Preferencias de los inversores internacionales latinoamericanos
Los inversores inmobiliarios procedentes de México y Venezuela suelen interesarse por propiedades que combinan el encanto histórico con las comodidades contemporáneas. Prefieren barrios céntricos como Salamanca y Chamberí, conocidos por su proximidad a tiendas exclusivas, galerías de arte y restaurantes de renombre. Estos compradores buscan inmuebles con un estilo atemporal, fachadas clásicas y edificios históricos restaurados. Además, prefieren las fincas que disponen de portero y garaje.
Estados Unidos se suma a la tendencia de inversión en propiedades de lujo en Madrid
El cliente inmobiliario procedente de Argentina se siente atraído por barrios como Chueca y Huertas. Estos barrios ofrecen una vibrante escena gastronómica y cultural. Los argentinos prefieren viviendas espaciosas y llenas de luz, ideales para recibir amigos y familiares.
Otros inversores internacionales, principalmente de Colombia y Perú, priorizan la búsqueda de propiedades en áreas muy céntricas como La Latina y Malasaña. Además de la ubicación, valoran apartamentos modernos y luminosos y la proximidad a restaurantes y centros culturales. El producto más demandado es una vivienda de entre 100 y 150 metros cuadrados, con dos o tres habitaciones y calidades elevadas.
Preferencias de los compradores chinos y rusos
Los compradores chinos y rusos suelen buscar propiedades de lujo en áreas exclusivas como El Viso, Puerta de Hierro o La Moraleja. Estos compradores prefieren inmuebles muy grandes, con un diseño contemporáneo y comodidades de alta gama. La seguridad y la privacidad son factores esenciales para ellos. Aunque este es un perfil de comprador en desarrollo con un alto potencial de crecimiento, el número de clientes de estos dos países aún no alcanza las expectativas, especialmente en el caso de los rusos que enfrentan mayores dificultades debido al estricto control sobre el origen de los fondos al adquirir una vivienda.
Preferencias de los compradores europeos y estadounidenses
Los compradores procedentes de otros países europeos, como Francia, Italia y Alemania, buscan propiedades que reflejen su estilo de vida cosmopolita. Optan por áreas como Retiro, Chamartín y Conde Orgaz. Estos barrios permiten disfrutar de amplias zonas verdes y localizaciones más tranquilas, pero con una excelente conectividad y acceso a centros educativos de alta calidad.
Madrid como Destino para Inversores Extranjeros en Bienes Raíces
En los últimos años ha crecido la presencia de estadounidenses que se instalan en Madrid. Por lo general, tienen unas preferencias de compra similares a las de los europeos en cuanto a ubicación, aunque buscan pisos algo más grandes, por encima de los 200 metros cuadrados. Prefieren viviendas en buenas fincas, con un diseño minimalista y estancias abiertas. Estar cerca de centros educativos de calidad y equipamientos deportivos también son elementos importantes a la hora de tomar una decisión de compra. Además, buscan diversificar sus inversiones y aprovechar la fortaleza del dólar mediante la adquisición de propiedades en Madrid.
El futuro del mercado inmobiliario de lujo en Madrid
Madrid se consolida como un referente mundial tanto para inversores internacionales como nacionales. La ciudad atrae a una amplia gama de compradores e inversores, impulsada por su cultura, economía y calidad de vida. El desarrollo de proyectos de lujo y la constante renovación urbana aseguran que Madrid mantenga su posición destacada en el mercado inmobiliario global.
En conclusión, la capital española ha captado la atención del inversor internacional en el segmento de lujo del mercado inmobiliario. La diversidad en el perfil de los compradores y sus preferencias específicas según su procedencia han contribuido a la revitalización y modernización de diversas áreas de la ciudad. Este fenómeno no solo ha elevado los estándares del mercado, sino que también ha impulsado el crecimiento económico y la calidad de vida en Madrid.